Beach lounge bar Le Kabanon, en el hotel 5* Gran Lujo Dinarobin, Isla Mauricio
En un ambiente sofisticado y cool, el nuevo beach lounge en el bar de playa Le Kabanon, en el hotel 5* Gran Lujo Dinarobin, en Isla Mauricio, rezuma elegancia y sofisticación por los cuatro costados al estilo de los hoteles de lujo de la Costa Azul, y sin perder la autenticidad de Beachcomber, marca de la casa. A la sombra de una amplia sombrilla, sus blancos y cómodos sillones revestidos en madera a juego con las toallas azul turquesa, que proporcionan la nota de color al espacio, son ideales para tomar un cóctel, leer, escuchar música o hacer un exclusivo lunch en la playa. Blanca arena, océano azul… una combinación de color perfecta en uno de los escenarios naturales más espectaculares de Isla Mauricio, La Península de Le Morne.
Si hay algo que caracteriza a este espacio exclusivo es su diseño actual, con música ambiente electrónica de fondo que se combina el sonido de las olas del mar y un servicio personalizado con camareros a disposición que atenderán todas las peticiones del huésped: desde bebidas, snacks o toallas hasta el delicioso menú “a la carta” del chef, con platos elaborados, mezcla de estilos gastronómicos que reproducen una explosión de sabores al paladar. Un exótico menú, Oriente y Occidente en un bocado que incluye desde ensaladas de hierbas aromáticas hasta langosta a la parrilla con ajo, perejil y vino blanco, gambas salteadas al estilo chino o tortilla de camarones al estilo Thai, con una salsa especial.
Entre su amplia selección de vinos y champagnes, se incluye el famoso tinto de verano typical Spanish. En su carta de cócteles destacan los refrescantes Tropical con la mezcla de ron, malibú, zumo de plátano y de melocotón y el P’tit Punch ron, limón y azúcar. También hay cócteles sin alcohol como On the Beach (con zumo de melocotón, plátano y naranja con sirope de granadina) y Le Kabanon Sunrise (con zumo de fruta de la pasión, naranja y melocotón – un auténtico despertar de los sentidos-). Eso sí, la entrada es exclusiva a los huéspedes del Dinarobin y Paradis. Y todo ello con el océano como escenario de fondo… Apetecible ¿verdad?.