Las épocas frías, como el invierno, pueden debilitar el sistema inmunitario, haciéndolo más vulnerable a ciertos patógenos que pueden afectar a nuestro organismo a través de las mucosas y la piel.

Las temporadas de frío, como el invierno, suelen venir acompañadas de resfriados, catarros y malestar para la mayoría de las personas. De hecho, desde la Sociedad Española de Inmunología (SEI) explican que, durante el invierno, existe una mayor vulnerabilidad del sistema inmune a ciertos patógenos que pueden afectar al organismo a través de las mucosas y la piel.

 

Por este motivo, el frío puede hacer que nuestro sistema inmunitario se vea ralentizado e incrementar las posibilidades de padecer algunas dolencias. Sin embargo, aunque el frío puede debilitar nuestras defensas, no es este clima lo que nos enferma, sino los hábitos que adoptamos para preparar y reforzar nuestro sistema inmune, especialmente durante esta temporada. 

 

 

Consejos para reforzar el sistema inmune en invierno: 

1. Aumenta las legumbres en tu dieta: más allá de ser ricas en sabor, las legumbres aportan, sobre todo, hierro y vitamina B6, ambas necesarias para el buen funcionamiento del sistema inmune. Además, si quieres potenciar sus beneficios, puedes añadirles un chorrito de limón natural para aportarles vitamina C, que facilita la absorción de este mineral.

 

2. Procura descansar bien: tener un sueño de calidad es esencial para disfrutar de un sistema inmune fuerte. Cuando duermes, tu cuerpo regenera y repara algunas células importantes para la función inmunológica. Por ello, trata de dormir, al menos, entre 7 y 8 horas por la noche, estableciendo una rutina que ayude a regular el sueño para aumentar la calidad de tu descanso.

 

3. Procura mantener tu cuerpo siempre hidratado: la hidratación es importante para todas las áreas de nuestra vida. Un cuerpo deshidratado es más propenso a padecer un descenso en la capacidad de respuesta ante las infecciones.  Intenta beber 2 litros de agua al día de manera rutinaria. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá!

 

4. Realiza ejercicio físico de forma moderada: como el consejo anterior, la actividad física moderada es esencial para mejorar nuestra salud en su conjunto. No solo eso, también es una de las mejores maneras para fortalecer nuestras defensas en invierno. Mientras que el sedentarismo hace que incremente el riesgo de padecer enfermedades, infecciones y dolencias, realizar ejercicio físico activa las células inmunes.

 

5. Utiliza complementos alimenticios para ayudar a tu sistema inmune: además de seguir los consejos anteriores, siempre puedes aportar un extra de ayuda a tu sistema inmunitario gracias a complementos alimenticios de calidad, especialmente de vitamina C. 

 

 

*La vitamina C contribuye al mantenimiento del sistema inmunitario en condiciones normales.

*La vitamina C contribuye a la formación normal de colágeno para el funcionamiento normal de la piel.

*La vitamina C protege las células frente al daño oxidativo.

*Los complementos alimenticios no deben utilizarse como sustitutos de una dieta equilibrada y variada y un estilo de vida saludable. 

 

Fuente: Solgar – www.solgar.es